Encuentro ecuménico de Pentecostés

El sábado 23 de mayo, en la parroquia Nuestra Señora de la Paz, dirigido por el padre Tomás Barbero y organizado por los ministros de la Zona Norte, celebramos Pentecostés, como parte de la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos.
La Iglesia fue preparada marcando un camino en dirección al Pozo, en relación con el texto bíblico que sería leído de Juan 4.

La Iglesia estaba colmada de jóvenes en la parte alta, y mayores en la parte baja del templo cuando la Pastora de la Iglesia Evangélica del Río de la Plata tuvo a su cargo el mensaje y nos llevó a ver cómo Jesús, habiendo ido por Samaria, traspasó la frontera política, ya que no se trataban entre sí; la frontera religiosa, ya que los samaritanos y los judías discrepaban seriamente sobre el lugar de adoración y más; y la frontera de género, al hablar con una mujer.

Jesús así mostró cómo aceptar lo diverso, que no haya fronteras, sino una relación fluida entre unos y otros.
“El Pozo” no tiene dueño, es de todos. Para nosotros es el Pozo de Agua Viva que ofrece Jesús a todos por igual.
Jesús quiere que tengamos sed de esta agua que Él ofrece.